viernes, 19 de marzo de 2010

Rostrillo


rostrillo.

(Del dim. de rostro).
1. m. Adorno que se ponían las mujeres alrededor de la cara, y hoy se suele poner a las imágenes de la Virgen y de algunas santas.

La de la foto es la Virgen de las Virtudes de Villena. La antigua imagen fue quemada por unos milicianos durante la guerra civil. Navarro Santafé, un escultor de Villena -autor de la escultura del oso y el madroño que está en la Puerta del Sol de Madrid- talló esta imagen y cuenta que, mientras trabajaba, su madre, que siempre había visto la imagen vestida, coronada y enjoyada, le decía: Esa no es la cara de mi Virgen. Parece ser que el escultor, hizo un experimento: fabricó un rostrillo de cartón y se lo puso a la talla. Entonces su madre se puso de rodillas diciendo: ¡Es Ella!

11 comentarios:

  1. Pues mire! si Vd. va a ser feliz con esto!

    Y es la imagen de Madre y el Niño quienes nos contemplan!

    Jaimón y yo somos de un glob y de poco más!

    Un abrazo,

    JyY

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  2. Rostrillo!!!,toda la vida creyendo que era un despectivo de rostro y mira...Y además hay su poquita de conexión con la memoria histórica.La madre del escultor conocía a la otra imagen...Y hay muchas Vírgenes levantinas con rostrillo,creo que mi Fuensanta lo tiene,voy a buscar una estampa ahora mismo.Esa estampa,también tiene historia y ,para mi,emocionada memoria Don Javier.Gracias y un abrazo Janusa

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  3. En el pecado llevaré mi penitencia?

    Es así?

    Pues que así sea.

    Un abrazo,

    JyY

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  4. Si,la Fuensantica,también tiene rostrillo.

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  5. Viene muy a tono con lo que se acerca, las procesiones, les explicaré a mis "palurdos" que un amigo le ha enseñado a este otro "palurdo", como se llaman esos adornos que lleva la imaginería nazarena.
    Un abrazo

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  6. Investigaré lo de "palurdo" Don unwakeable. Suena bien.

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  7. Es preciosa la imagen. Y la historia de la devoción, también.

    Este verano, volviendo a Madrid de una escapada playera con los niños, paramos en Villena para conocer un poco el pueblo. La providencia nos condujo, sin nosotros saber ni buscar, hasta el monasterio. Allí pudimos escuchar la Santa Misa, tras la cual el oficiante (un sacedote neocatecumenal oriundo, pero en misión en los USA) nos invitó a visitar el camarín de la Virgen y a compartir un agradable rato de charla con 4 seminaristas yankees que estaban pasando las vacaciones con él.

    Uno de esas pequeñas sorpresas que salpican lo cotidiano y uno ya no olvida nunca en su vida.

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  8. Don Séneka: Si vuelve usted por aquí -por Villena, digo, no por el blog- no deje de preguntar por el Rector Magnífico del Santuario y -si lo encuentra- exíjale que le invite a usted a comer corderito en el restaurante de Don Gil.

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  9. Pater, tal como me lo plantea el hilo discursivo cambia por completo: ¡tendré que encontrar la excusa de la playa para pasarme por Villena!

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  10. Bueno, cerca del puerto también conozco un par de sitios donde hacen unos arrocitos nada desdeñables. No hay por qué alejase del mar para comer y charlar a gusto.

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  11. Los rostrillos se emplearon mucho en el barroco tal y como datan los archivos diocesanos de la época. Por desgracia muchos están tratando de eliminarlo de la imágenes para acabar vistiendolas como todas las demás. Pienso que no sólo eliminan su base histórica, pues le arrancan su personalidad propia y elegancia.
    Restaurador de arte religioso

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